domingo, 28 de septiembre de 2008

Cómo empieza todo o el adiós a la vida sedentaria

Correr se ha convertido en el deporte de moda.
Ya no nos extrañamos si coincidimos en el ascensor con nuestro vecino en pantalón corto haciendo peligrosos saltitos de calentamiento, o si mientras estamos paradas en el coche frente a un paso cebra en pleno Paseo de Gracia, nos cruza el típico runner con su ipod y sus gafas fashion, cuyo sudor seguro que desprende un aroma a perfume caro (y es que depende del barrio dónde estés el perfil de corredor varía y mucho, pero de esto ya hablaremos más adelante).
En fin, correr y correr, pero hacia dónde? y porqué?
Hasta que no tienes un corredor en casa no entiendes nada de nada, piensas que todo se basa en una moda pasajera impulsada por alguna marca de zapatillas deportivas, pero que equivocada estás! y sobretodo si piensas que esto no te afectará, todavía estás más equivocada!

Puede ser que todo empiece una mañana desayunando:
- Guapa, me voy a correr un rato, ¿ porqué no te vienes? Y te lo dice mientras estás disfrutando de unas hipercalóricas tostadas con mantequilla.

O bien, una tarde, mientras te miras en el espejo con una talla 36 de tejanos en una mano, y la otra apretándote ese michelín que va en vías de crecer y crecer, mientras piensas en cómo podía ser que un día entrases ahí, pasa el muchacho con su bolsa del gimnasio y su sonrisa, entonces es cuando automáticamente decides que debes abandonar tu vida sedentaria, y sólo falta que te pregunte ¿porqué no te vienes?

Ya está, ya has caído, ya vas camino de que salga ese "yo saludable" que todos y todas llevamos en nuestro interior, ahora ya sólo una duda asalta tu mente : ¿QUÉ ME PONGO?